Ya falta poco para Navidad y con ella llegan las celebraciones de empresa y las tradicionales cenas de empleados. Sin embargo, si quieres motivar a tus trabajadores y que ellos se conviertan en los principales embajadores de tu empresa, puedes potenciar la comunicación complementando las cenas y comidas con otras acciones diversas y muy efectivas. Hablamos de las acciones de teambuilding.
Si el presupuesto para este tipo de acciones no es demasiado elevado, se pueden organizar jornadas familiares en la empresa. Por ejemplo, se puede invitar a los más pequeños de la casa a que conozcan donde trabajan sus padres y complementar la visita con alguna actividad navideña, como un concurso de dibujo o preparar entre todos un villancico en el que se potencien los valores corporativos de la empresa.
Otra actividad con niños que puede motivar mucho a los empleados es la visita de los Reyes Magos en la empresa. Se trata de un clásico que sigue triunfando y que mejora mucho la comunicación interna entre los empleados y entre los directivos.
Otra idea para potenciar la comunicación interna es hacer una subasta de regalos en la cena navideña. El dinero puede destinarse a una ONG escogida por la organización. De esta forma, la empresa transmitirá unos valores de cara a sus empleados pero también lo hará de cara al público general, trabajando la Responsabilidad Social Corporativa y la reputación.
Algunas empresas también apuestan por la solidaridad y las causas benéficas cuando se trata de regalos a los trabajadores. Así, muchas organizaciones prescinden actualmente del lote de Navidad a sus empleados, para destinar ese presupuesto a algún tipo de acción solidaria. Se trata de una idea muy valorada por los empleados, que además lo ven como algo diferente.
¿Merecen la pena todas estas acciones?
Muchos directores generales y empleados, se plantean la pregunta de si este tipo de actividades de comunicación interna merecen la pena y si es efectivo destinar una parte del presupuesto a ellas.
Aunque todavía no se le da la importancia que merece, la comunicación interna es una herramienta estratégica en las empresas, ya que permite transmitir a los empleados los valores y objetivos de la corporación. Esto genera una cultura de pertenencia y fidelidad y convierte a los miembros internos de la empresa en los mejores embajadores de esta. Cuanto más y mejor hablen los empleados de la empresa, menos presupuesto se tendrá que dedicar a otras acciones de comunicación. ¡Los propios empleados publicitarán la empresa!
Además, está demostrado que cuanto más motivado esté un trabajador o trabajadora, mejor será su productividad. Para aumentar su rendimiento, es importante que se sientan integrados y en línea con la filosofía y los valores de la organización.
Esto sí, siempre que pensemos en realizar comunicación interna, hay que tener claro que la comunicación interna, para que sea efectiva, debe ser bidireccional. De poco sirve transmitir mensajes desde dirección, si no se escucha lo que los empleados necesitan y opinan sobre la empresa, su funcionamiento, sus valores, etc. Por eso, está bien aprovechar todas las acciones de comunicación interna para que los altos cargos se “acerquen” a su equipo. No solo los empleados lo verán como un gesto cercano y respetuoso, sino que puede resultar muy efectivo para tener una visión general de cómo se encuentra el ambiente laboral en la empresa.
Por supuesto, cuando ofrecemos estos consejos tenemos en cuenta que todo depende de la cultura corporativa, de la personalidad de los directivos, del tamaño de empresa, etc. Los tipos de acciones, los flujos de comunicación y el ambiente de trabajo varía mucho de una compañía a otra y no podemos generalizar. Lo que sí debemos tener presente y queremos resaltar como expertos en marketing y relaciones públicas es la importancia de la comunicación como herramienta de productividad empresarial.